Presentamos la historia alegre y cómica de dos jugadores de fútbol de los dos equipos de nuestra ciudad en la que se muestra toda esa intolerancia absurda por ser hincha del color verde o del rojo. Se vive toda la euforia de un estadio de fútbol con narración deportiva, efectos sonoros etc. Finalmente logramos transformar la situación de estos dos personajes que se torna agresiva en una situación de tolerancia, respeto y sobre todo de paz, mostrando incluso al final, el intercambio de camisetas y abrazos por parte de los dos rivales demostrando así, que este clásico no lo ganó el verde ni el rojo. Este clásico lo ganó la paz.
viernes, 3 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario